Texto y fotografía by Samara Saavedra

Quiero escribirte, como muchas otras veces, pensé tus posibles respuestas… todas ofensivas.  Me detuve.

Tu negativa estaría seguida por mi cobardía, parpadearía dos o tres veces y con los ojos muy abiertos, mis pupilas dilatas y desentendidas verían mi mano apagar el teléfono y guardarlo bajo la almohada o tal vez lo llevaría hasta el piso…para poder fingir que nada paso.

El miedo no me fue suficiente.

  • Facebook
  • Twitter
  • Gmail

Como si nada sintiera, te saludo tan casual como antes, tan fresca, tan soberbia, tan yo altanera, no decido si me considero psíquica o muy pendeja por haber adivinado tu respuesta y porque sin embargo te escribí, no contestas mis preguntas, mientras espero leo tu estado, una frase vieja dedicada a una chica nueva, eres tan predecible y yo tan estática.

¿Por qué seguimos haciendo lo viejo, esteremos atascados en el tiempo?

Solo quería decirte que ya no te amo y que sé porque.

Quería darte esa gotita de sabiduría que llego a mi corazón de la mano de un nuevo amor, quería decirte que el amor crea belleza y de la belleza se genera la felicidad, el alimento del alma.

A nosotros amor nos sobra, no lo niego, nos falto inteligencia y creatividad, perdimos la capacidad de crear belleza y sin alegría nuestra alma moría de hambre.

Aún así. Te extraño como a nadie.

Comentarios con Facebook